Tarde,
como
siempre,
sobre
el final,
tarde.
Justo
a tiempo
para
esquivar el vértigo
y
caminar por la cornisa,
para
volver a ver,a sentir,
a
apreciar
y
a entender imágenes en papel.
Y
sentirme parte del
rebaño
descarriado,
de
los orfebres de versos,
de
los buscadores de singularidades
en
la monocromía de la rutina.
De
los artesanos de la cotidianidad
observadores
agudos pero optimistas
que
ven las flores en el barro
y
el adoquín,
que
viven el camino
con
un placer
que
excede al del dolor del fatal fin.
Que
buscan en la tinta una chispa
capaz
de encender todos los fuegos,
impoluta,
in extinguible,
capaz
de amalgamar todos los apegos,
consciente
de su carácter de invencible.
Tarde,
pero
suelto esta misiva,
para
el que la entienda y la reciba,
aunque
sea tarde.
Feliz dia escritores. me parece un gran regalo mostrar este texto, parte de mi (inédito aún quinto libro, que se va a llamar "Poemas después del fondo de todos los fondos", tengo algunos textos, el nombre y no mucho más, pero está decidido.